Ya sabemos que te estás preguntando qué es la musicoterapia, cuáles son sus beneficios, etc. Y, es que, internet está lleno de artículos en los que se habla de distintas terapias psicológicas que responden a tu búsqueda de “mi hijo no hace caso”.
Veamos qué es esta nueva tendencia y si realmente merece la pena o no.
Analicemos un poco el poder psicológico de la música
La música mueve masas
Probablemente, no te habías dado cuenta hasta ahora, pero la música es parte de ti desde el momento en que naciste.
Quizás no te acuerdas, pero cuando eras un bebé, ya hacías sonidos pseudomusicales. Y dirás…¿sonidos pseudomusicales? Sí, el balbuceo, por ejemplo, es uno de los primeros sonidos pseudomusicales que realizaste antes de cantar tu primera canción de heavy metal.
El oído es uno de los órganos que se desarrollan en las primeras etapas de un feto, por lo que una parte bastante importante de nuestra memoria es auditiva.
Esto significa que gran parte de tus redes neuronales han sido y son modificadas constantemente por los sonidos que escuchas en tu día a día, desde la voz de las personas que te rodean hasta ese claxon desesperante en la autovía cuando vas al trabajo.
Aunque te parezca extraño, la musicoterapia está relacionada directamente con el tono de voz, pues los psicoterapeutas no solo utilizan música en sus sesiones, si no, su propia voz.
¿Qué comunica nuestro tono de voz?
Muchas cosas y muy diferentes. Por ejemplo, ¿conoces el “baby talk”? No es más que el cambio de tono de voz que realizas cuando le hablas a tu bebé.
Con tu tono de voz, tal vez estás intentando que se duerma o que se calme en plena pataleta por un mal golpe.
Está claro que no necesita entender completamente lo que le estás diciendo con palabras, porque probablemente sea muy pequeño para mantener una conversación. Sin embargo, si tu tono de voz es el adecuado, hará exactamente lo que quieres que haga.
Así es cómo influye la música en las personas. Esta es la razón por la que eres capaz de llorar escuchando una canción triste, o predecir el momento más terrorífico de la película que estás viendo por la música de fondo.
Por ello, la terapia musical o musicoterapia puede ayudarte a que tu hijo te haga caso o solucionar los posibles malestares psicológicos que le surjan durante su etapa infantil o en la edad de la adolescencia.
Sigamos en nuestro camino de descubrir la musicoterapia a través de la psicología infantil.
Explorando la psicología del niño
Lo sabemos, ser padres no es fácil. Un niño no viene con un manual de instrucciones, pero sí que puedes crear uno personalizado de tu hijo entendiendo lo que le sucede en cada etapa.
Durante los primeros meses de vida, todo parece de color de rosa. Sin embargo, a partir de los dos años de edad más o menos, empiezan a surgir las primeras rabietas a causa de su conducta.
A lo largo de esta etapa se manifiestan los primeros síntomas de la etapa del “no”, en la que muestra sus primeros pinitos en el ámbito de la rebeldía.
Puede que esta etapa se te haga eterna, aunque prometemos que el tiempo pasa rápido y cuando quieres darte cuenta, tu hijo ya tiene entre tres y cinco años y experimenta unas ganas inmensas de palpar la realidad. ¿Estás dispuesto a seguir ayudándole entonces?
Por supuesto que sí, incluso cuando la vergüenza o la timidez amenacen con interceder en ese carácter alegre y extrovertido del pequeño al pasar al siguiente período.
Pero, no nos desviemos del tema principal: la música en la psicología. Esa arma de doble filo que juega un papel imprescindible en nuestra vida y promete ayudarnos en nuestro desarrollo a lo largo de las diferentes etapas.
Canciones infantiles educativas
Por muy absurdas o repetitivas que te parezcan, las canciones infantiles educativas son el primer paso para solucionar el hándicap de: “mi hijo no hace caso”.
A través de éstas pueden aprender sencillas tareas o incluso costumbres educacionales. Son fáciles de memorizar y pegadizas, normalmente. A continuación, os dejamos nuestras preferidas:
- La Vaca Lola
- Baby Shark
- Cantajuegos
Como ves, están dirigidas a distintas edades y cada una pretende ayudar al niño en una parte distinta de su aprendizaje, desde el inglés hasta los utensilios de la casa.
Y para finalizar…la guinda del pastel
La musicoterapia puede ser de gran ayuda a la hora de corregir problemas psicológicos, aunque si has prestado atención a todo lo anterior, podrás utilizar la música desde una perspectiva educativa, entendiendo cada etapa de tu hijo y previniendo posibles contratiempos en su desarrollo.
No te olvides de que el niño sigue creciendo y recorriendo más etapas, entre ellas, la adolescencia.
Por cierto, ¿cómo crees que influye el tipo de música que escucha un adolescente en esta esta etapa?
Es un tema bastante interesante a debatir, pero lo dejamos para los comentarios, aunque no descartamos realizar un post con esta temática próximamente…
Utiliza tu sentido común, aunque sea el menos común de los sentidos.
Me ha gustado mucho como tratáis el tema, me ha servido mucho la información, gracias.
Muy útil e interesante, no sabía que se desarrollaba primero la parte auditiva en el feto, eso explica muchas cosas. Ojalá hablarán más de la musicoterapia y sus beneficios. Saludos.