La Terapia Miofuncional aplica las técnicas y maniobras que se utilizan para la corrección de las alteraciones del sistema orofacial, lengua, paladar, cara cuello… La finalidad que busca la terapia es corregir los desequilibrios bucofaciales que impiden funciones necesarias como la masticación, deglución, respiración, fonación y producción del habla. Esta técnica es aplicable por tanto a muchas patologías, en definitiva a todas aquellas que presenten desajustes en los órganos orofaciales que dificultan la masticación, respiración, deglución articulación y fonación.
Los objetivos que se pretende alcanzar con su aplicación son varios:
• Corregir las alteraciones anatómicas producidas por los malos hábitos: succión del dedo pulgar con apoyo palatal, permanencia de chupete, hábito prolongado de tetinas.
• Reorganizar el equilibrio muscular de los órganos orofaciales con el fin de que sus movimientos y praxias estén en perfecta coordinación.
• Conseguir una mejora en la oclusión modificando los patrones incorrectos por un desequilibrio de fuerza muscular.
• Reeducar el modelo respiratorio que con frecuencia ocasiona una hipotonía del velo del paladar. En muchos niños la hipertrofia de vegetaciones adenoideas (HVA) y la hipertrofia amigdalina (HA) obligan a convertirlos en respiradores bucales persistiendo este modelo aun después de su extirpación.
• También podemos constatar que, en nuestras valoraciones clínicas muchos de los niños que presentan la necesidad de practicar una terapia miofuncional han padecido procesos respiratorios, pulmonares y alérgicos (bronquiolitis, bronquitis, procesos asmáticos, crisis alérgicas) en su primer año de vida manteniendo la incorrecta respiración derivada de su proceso inflamatorio.
• Otro de los objetivos es el de modificar la interposición lingual entre los arcos dentarios impidiendo la correcta oclusión. La musculatura peribucal se contrae impidiendo la movilidad de la mandíbula y con ello el desarrollo de los maxilares ocasionando un desajuste mandibular. A esta alteración se le denomina deglución atípica
Los tipos de ejercicios que se suelen aplicar son:
• Ejercicios para aumentar la tonicidad de la musculatura peribucal
• Ejercicios para aumentar la tonicidad lingual
• Ejercicios de praxias linguales con el fin de controlar la hipotonía lingual, logrando el afinamiento de la lengua, la elevación de esta al paladar, colocar la postura correcta para la deglución. Trabajar el control y tono lingual con ejercicios de la mitad de la lengua.
• Ejercicios de praxias labiales con el fin de controlar la hipotonía labial, logrando el alargamiento del labio superior, apoyándonos con los dientes de la arcada inferior para sujetar el labio superior. Masaje labial con el fin de conseguir mayor flexibilidad y relajar la musculatura.
• Ejercicios para aumentar el tono muscular de los maseteros.
• Ejercicios de tensión y distensión del mentón. Relajando el labio inferior y procurando eliminar la hipertensión del mentoniano.
• Ejercicios deglutorios con agua para ver si la lengua se coloca correctamente en el paladar.
• Ejercicios para el sellado labial.
• Ejercicios para aumentar y controlar los músculos bucinadores.
• Ejercicios respiratorios.
Os dejamos un enlace donde podéis ver más actividades:
http://www.logopedaencasa.es/ejercicios/metodo-padovan/